Ella lo idealizó, y sabe que el hombre real la va a desilusionar, de hecho, la desilusiona en el día a día. Pero está segura de que lo quiere de la misma manera, con la misma intensidad quiere a su idealizado que al real, sabe que el primero es solo una fantasía, una imagen congelada que quedó en el tiempo.
Se repetía una, dos, tres, mil veces que no podía seguir así, que en esta situación su alma parecía incinerarse en la desesperación... Continuar leyendo